La séptima edición del Americana Film Fest confirma a este certamen como una de las citas cinéfilas indispensables de la ciudad condal. El Americana Film Fest ha abierto definitivamente su mirada al territorio norteamericano, con una irresistible programación de cine independiente, en la que además de la estadounidense se apuesta firmemente por la inclusión de producciones canadienses y mejicanas.
El hermoso drama con tintes fantásticos Antología de un pueblo fantasma (Répertoire des villes disparues, 2019), del quebequés Denis Côté, fue condecorado con el Premio de la Crítica ACCEC a la mejor película. Un film singular, dotado de una gran personalidad y en cuya aproximación decididamente política incide en cuestiones acerca de la despoblación rural y políticas de inmigración. El siempre controvertido Harmony Korine también fue reconocido con una mención especial gracias a su alocada comedia The Beach Bum (2019), en la que un omnipresente y excéntrico Matthew McConaughey es Moondog, una suerte de Jep Gambardella californiano, tan extravagante como inolvidable. Finalmente, Honey Boy (2019), dirigida por la israelita Alma Har’el a partir del guión autobiográfico de otro tipo controvertido, –el actor Shia LaBeouf–, quien también se reserva el personaje de su propio padre, principal culpable de la traumática infancia sufrida por la futura estrella de Hollywood. Por su parte, el jurado joven del festival reconoció las virtudes de la original y dolorosa Swallow (2019) escrita y dirigida por Carlo Mirabella-Davis, donde la protagonista es una mujer de casa con una obsesión por la ingestión voluntaria de objetos peligrosos.

A lo largo de las seis intensas jornadas que conformaron la programación de este recomendable festival barcelonés, se pudieron descubrir los trabajos de nombres contrastados, como la mirada visceral con tintes buñuelianos de Gael García Bernal y los jóvenes sin futuro de Ciudad de México que protagonizan Chicuarotes (2019), la melodramática y coral Matthias & Maxime (2019), de Xavier Dolan, y la interesante aproximación cinéfilo-documental de Abel Ferrara con The Projeccionist (2019). En otro contexto, cabe destacar también a la interesante The Vast of Night (Andrew Patterson, 2019), una película valiente en su planteamiento y en su forma de apostar por el fantástico a partir de un lenguaje cinematográfico poco usual. El humor surrealista fue copado por la pareja de directoras formada por Jocelyn DeBoer y Dawn Luebbe, quienes con Greener Grass (2019) ofrecen una sátira bastante cruel sobre el devenir de la sociedad actual. También desde una óptica paródica, pero en una vertiente de introspección personal, se presentó La mejor defensa es un ataque (The Art of Self-Defense. Riley Stearns, 2019), a la medida perfecta de su protagonista, Jesse Eisenberg. Otra comedia, aunque algo más blanda, es la estadounidense Saint Frances (2019), de Alex Thompson –finalmente ganadora del Premio del Público–, encargada de inaugurar esta séptima edición del Americana, mientras que ese irregular pero interesante biopic sobre la mítica Jean Seberg conocido con el título de Seberg: Más allá del cine (Seberg, 2019), dirigido por Benedict Andrews y protagonizado por una deslumbrante Kristen Stewart, destacó como glamurosa sesión de clausura de un festival que se vive con una irresistible exaltación de pasión cinéfila
Albert Galera