John Ford (1939)
GANAR UN PREMIO POCAS VECES SIGNIFICA SER EL MEJOR. Con los de la Academia eso sucede en tantas ocasiones que ya parece tenerse asumido. En todo premio –o en casi todos– interviene un aspecto muy importante de realidad adulterada basada en mucha publicidad y campañas costosísimas que buscan y, en ocasiones encuentran, esa recompensa anhelada. El año en el que La diligencia pudo haber conseguido la estatuilla a mejor película fue una edición de mucha calidad. No hay que olvidar que la película de John Ford compitió con títulos como Lo que el viento se llevó, Cumbres borrascosas, Adiós, Mr. Chips, El mago de Oz, Ninotchka, Beau Geste, La fuerza bruta, Corazones indomables y Solo los ángeles tienen alas. Sin duda eran grandes films, pero la dirigida por John Ford revolucionó el cine en muchos aspectos.
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