No es ningún secreto que Manel Gil- Inglada es uno de los compositores no solo catalanes sino también españoles más dotados para la animación desde que lo descubrimos en Cher Ami y en títulos posteriores como Papá, soy una zombi. Animación que ha sabido canalizar hacia la ciencia ficción, ya que aquí, en ese cortometraje ha jugado además con una gran ventaja: no hay diálogos.
Contenido reservado para suscriptores. Para acceder al contenido haz el login siguiendo este link: LOGIN.
Para ingresar como nuevo miembro sigue este link: NUEVO MIEMBRO.
Para ingresar como nuevo miembro sigue este link: NUEVO MIEMBRO.